Uno de los mitos más persistentes en el mundo de las finanzas personales es la creencia de que dejar un saldo pendiente en tu tarjeta de crédito puede ayudarte a mejorar tu puntaje crediticio. Muchas personas piensan que si no pagan el total de su balance cada mes, y dejan una pequeña cantidad sin saldar, eso demostrará que están usando crédito activamente y que, por tanto, su historial crediticio mejorará. Sin embargo, esta idea es completamente errónea y, en la práctica, puede hacer más daño que bien.
Para entender por qué este mito es perjudicial, es importante conocer cómo se calcula el puntaje de crédito. Uno de los factores más relevantes es el uso de crédito o índice de utilización, que representa el porcentaje del crédito disponible que estás usando. Por ejemplo, si tienes una tarjeta con un límite de $1,000 y mantienes un saldo de $500, tu utilización es del 50%, lo cual ya es considerado alto. Los expertos recomiendan mantener este porcentaje por debajo del 30%, y de ser posible, por debajo del 10%.
Cuando dejas un saldo pendiente en tu tarjeta de crédito, no solo aumentas tu índice de utilización, sino que también te expones al cobro de intereses. Las tasas de interés de las tarjetas de crédito son, por lo general, bastante elevadas, lo que significa que podrías terminar pagando mucho más por las compras que ya realizaste. Con el tiempo, esto puede convertirse en una carga financiera difícil de manejar, especialmente si solo realizas pagos mínimos.
Otro aspecto importante es el historial de pagos. Pagar el total del saldo a tiempo cada mes no solo evita intereses, sino que también demuestra a los acreedores que eres responsable con tu crédito. Este comportamiento tiene un impacto positivo directo en tu puntaje, a diferencia de dejar un saldo pendiente, lo cual no aporta ningún beneficio adicional en términos de historial crediticio.
Además, mantener saldos sin pagar también puede llevar a una deuda acumulada, especialmente si tienes más de una tarjeta o si comienzas a gastar más de lo que puedes pagar cada mes. Esto puede crear un ciclo difícil de romper y dañar gravemente tu puntaje si en algún momento te atrasas con los pagos.
En resumen, dejar un saldo pendiente con la idea de “hacer crecer el crédito” es un mito financiero que puede costarte dinero y afectar tu puntaje. La mejor forma de construir un buen historial crediticio es utilizar tus tarjetas de manera responsable: manteniendo una baja utilización, pagando a tiempo y, de ser posible, saldando el balance completo cada mes.
El crédito no es una herramienta para endeudarte, sino un recurso que, bien manejado, puede abrirte puertas importantes: desde obtener un préstamo con buenas tasas hasta comprar una casa o un auto. Romper con este mito es dar un paso clave hacia una vida financiera más saludable y sostenible.